Tengo piojos, en el pubis.

Escrito el 20 abril, 2016

Por: Sexnambula

Las ladillas, esos bichitos.

 La ladilla . Esas cosas pequeñitas de los que todos los que hemos pasado por la guardería o el colegio tenemos un recuerdo más o menos lejano. Por no hablar de esas sufridas madres, de ese gesto entre incrédulo y resignado cuando se les comunicaba oficialmente que este año sí, nuestro cole había sido maldecido con una plaga de bichitos cabrones. Se le quedaba la misma cara de pocker que a los padres de la nena de Poltergeist. Cuando les susurraba, con esa pelucón rubio y esa mirada entre inocente y muy inquietante: “ ya están aquiiiiiii…”. Tu pobre madre, con ese cariño y ese buen hacer, liendrera en una mano (ese peine infernal), liquido mata piojos en la otra ( Filvit se llamaba o algo así, creo). Invocando a los dioses de la salud que por Dios, que se mueran todos, que no quedara ni uno.

Pasados los años, hay un día de repente en el que, el recuerdo nebuloso del picazón revive con fuerza en otro área lejana de la cabeza. Ese área del que seguramente no estábamos muy preocupados cuando teníamos piojos en la cabeza.

Si bien es cierto que el piojo genital  o ladilla no ataca tan masivamente a la población, tampoco estamos libres de ellos.

Pthirus Pubis (La ladilla).

Estos pequeños insectos llamados Pthirus Pubis, habitan el vello del área genital ( ojo, que también pueden trasladarse a barrios relativamente lejanos como axilas y barba), parecen salir de la nada y se manifiestan con un picor tremendo. Son muy pequeños, miden entre 1 y 3 milímetros, pero muerden como Rotweilers búlimicos.

Lo habitual es que estos pasen de cuerpo a cuerpo por contacto. Es decir, migración de selva púbica a selva púbica durante el frote frote carnal. Sin embargo, en el caso de que te veas atacado o atacada por semejante desgracia piojil, antes de proceder a la exterminación del vinculo con quien crees culpable,mientras que te jura y perjura que a el o ella nadie le ha pegado ladillas, y por tanto no te ha sido infiel, ten en cuenta una cosa, que estos bichejos se pueden propagar también de cuerpo a objeto y de objeto a cuerpo ( son así, les mola viajar, es que tienen patitas).

La excusa de que se ha comprado un bañador que estaba contaminado o que las sabanas del hostel de Londres donde pasó la Semana Santa, no estaban demasiado limpias, podrían no ser excusas baratas. Eso sí, ten la cabeza fría. La primera causa de contagio de las ladillas es la sexual.

 Por si te quedaba alguna duda, los piojos púbicos no son la misma especie que el piojo de la cabeza ( Pediculus humanis capitis). Ten en cuenta también que los condones no los detienen, por lo cual, hasta que no termines el tratamiento que te prescriba el médico y no te hayas librado de tus visitantes emigrantes, lo mejor, la abstinencia.